Mi casa es sesentera. Muy sesentera, la verdad. Hoy os presento el último cambio que he hecho a mis muebles, para rebajar el impacto de mis muebles.
He decidido forrar con tela, tanto el espejo como el cabecero de la cama. Más adelante, haré unos cojines también a juego.
El proceso es sencillo:
- Desmontamos el espejo, con cuidado para que no se rompa, dejando la madera que vamos a forrar al descubierto.
- Limpiamos la superficie. Esperamos a que se seque.
- Con ayuda de pegamento de contacto, pegamos la tela en los bordes. Yo he pegado los bordes que quedan pegados a la pared.
- Grapamos en las esquinas. Yo sólo he puesto 4 grapas, para que sea más facil retirar la tela cuando queramos volver a cambiar el aspecto del espejo.
Coste total del cambio: 8 euros gastados en 1,40 metros de tela.
Postdata: La funda nórdica es el siguiente cambio que vamos a hacer 😉
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